La corrupción de las almas con los nuevos catecismos

“Los catecismos, hijos Míos – en ellos encontramos abominaciones, mentiras y maldades de carácter pecaminoso. Vuestros hijos, sus mentes, están siendo corrompidas y destruidas. Los ojos son el espejo del alma.
“Cada padre de familia tiene la obligación hacia sus hijos de eliminar de sus escuelas estos libros diabólicos. La flojedad y negligencia de los padres de familia, así como la apatía de aquellos que tienen influencia ... O hijos Míos, se derramarán lágrimas; ¡pronto habrá rechinar de dientes! Os pido, os suplico como vuestra Madre que ahora preparéis vuestro hogar.” - Nuestra Señora de las Rosas, 29 de mayo, 1976

Después de inspeccionar algunas de las nuevas series de catecismos de las escuelas primarias, nos preguntamos si los autores realmente creen que la de ellos es la manera más eficaz de comunicarle a los niños la verdadera fe cristiana. Examinemos el enfoque de la serie Word and Worship (La Palabra y la Adoración) que es publicada por los Hermanos Benziger. (Lo que se dice sobre esta serie también puede aplicarse a los catecismos que son publicados por Sadlier y por la Editorial Paulista).
En el evangelio según San Lucas, leemos:

Pero en el texto de tercer grado, We Follow Jesús (Seguimos a Jesús), Lucas 10:30-42 es citado como sigue:

Ahora, ¿es ésta una falsificación flagrante del Evangelio – que deliberadamente omite el mismísimo punto y la esencia del episodio – que supuestamente debe de ser un truco pedagógico refinado? La visita que Jesús hace en Betania se convierte en algo tan insignificante y ordinario que no queda razón alguna para incluirla en la enseñanza de la religión. Pero el resultado es peor que una falta de conexión: representa una desfiguración de la humanidad sagrada de Cristo. Y esto es un efecto general de estas tres nuevas series de catecismos.

Es difícil creer que un miembro de la Iglesia, en pleno poder de sus facultades, consideraría tal distorsión del Evangelio, las enseñanzas de Cristo, como un medio efectivo para transmitir la verdad.

¿Qué podría decirse si por “razones pedagógicas” a los niños se les enseñó que Pablo VI fue uno de los jefes de estado en 1960 y que estaba preocupado principalmente por los asuntos internacionales, o que William Shakespeare fue un negociante del siglo XVI quien ha de recordarse por su manejo financiero de una compañía londinense, o que Ludwig von Beethoven se ganó un lugar en la historia de la música porque fue el padre del jazz?

El despojar la sagrada humanidad de Jesús de todas las características que constituyen la epifanía de Dios, presentarlo como una “persona buena y jovial” y ordinaria, es excluir el crecimiento de la fe en la divinidad de Cristo.

Los catecismos The Word and Worship pretenden presentar el mensaje de Cristo omitiendo todas las referencias a la santificación, a la vida eterna, al juicio de Dios, a la beatitud eterna, al infierno ... mientras le esconden a los estudiantes católicos el conocimiento de lo único necesario. Ciertamente esto no es más que una falsificación de la revelación cristiana y la doctrina de la Iglesia, como lo sería la historia de los Estados Unidos que no menciona el Compacto del Mayflower, la Declaración de la Independencia, los Documentos Federalistas o la Constitución.

Es posible que un cristiano sincero crea que la manera de atraer a los niños a Cristo – la epifanía de Dios, a Aquel a quien San Pedro le dijo: “Apartaos de mi, Oh Señor, porque soy un pecador” (Lucas 5:8) – sea agregar Su nombre a una lista de hombres “famosos” de la siguiente manera:

Cuando los santos cristianos (aquellos que genuinamente reflejan la humanidad sagrada de Cristo), y aún el Mismo Dios--hombre, se colocan en el mismo nivel que los filántropos humanitarios y figuras políticas controversiales como Martín Luther King, se suprimen y oscurecen las mismas cualidades que distinguen a un santo de los hombres ordinarios.

Los niños nunca podrán asir la gloria única de la santidad mientras estén expuestos a dicho enfoque. La manera apropiada sería mostrarles un verdadero héroe moral como lo es Sócrates y luego insistir en la diferencia radical entre esa figura tan admirable y un santo cristiano, un San Pedro, San Juan o San Francisco de Asís.

Pero los autores de estos libros tienen otros intereses. Por ejemplo, a los lectores de We Follow Jesús (Seguimos a Jesús) se les dice que Paul Tillich fue un gran cristiano. Ahora, por decir algo, ciertamente no fue un cristiano – como lo ha mostrado claramente el Profesor Freeman de la Universidad de Rhode Island. ¿Cuál podría ser el punto del autor excepto hacer una propaganda cruel para la des-sacralización de la religión? Y el interés en el “ecumenismo” en estos libros está totalmente fuera de lugar. El aula de clases no es el lugar para practicar ecumenismo sino para presentar el glorioso mundo de Jesús, el misterio de la Iglesia y los Sacramentos, así como las vidas heroicas de los santos. El verdadero ecumenismo presupone que los católicos están firmemente enraizados y educados en la fe.

La falsificación que caracteriza el retrato que Word and Worship hace de Cristo en el Evangelio es trasladada a la presentación de la moralidad cristiana y las enseñanzas cristianas de la Iglesia. Los autores consideran las enseñanzas de los Diez Mandamientos como un legalismo fuera de moda que no tiene lugar alguno en la religión del amor. Esto es una contradicción directa a lo que Cristo enseñó. El dijo: “Cumplid Mis Mandamientos”. El resultado de la presentación de la moralidad cristiana en estos catecismos es que a los niños pequeños se les alienta a no someterse a la guía de la Iglesia para que puedan ejercer su “libertad y responsabilidad”.

Es demasiado esperar que uno crea que aquellos, que son responsables por estos libros de texto, realmente tengan la intención de traspasarle a los niños la doctrina genuina de la Iglesia. En vez, debemos de concluir que ellos tienen la intención de divulgar un nuevo concepto de la cristiandad, uno que contradice radicalmente la doctrina de la Iglesia, la revelación cristiana que ha sido el objeto de la fe durante casi dos mil años, desde el día de Pentecostés al presente. Pero entonces, ¿por qué se atreven a asumir estos escritorzuelos de los falsos profetas el derecho de enseñar la religión cristiana a los niños católicos? Con toda honestidad, ¿no deberían cesar en presentarse como representantes de la Iglesia que inician a los niños en la Fe Católica cuando ellos, de hecho, están sustituyendo arbitrariamente la auténtica doctrina de la Iglesia con su cristiandad secularizada? ¿Por qué, si han perdido su fe en las enseñanzas tradicionales de la iglesia, no dejan de pasar sus propias herejías como una doctrina ortodoxa? Si desean rehacer la cristiandad convirtiéndola en una religión mundana, por qué no tienen por lo menos la honestidad de salirse de la Iglesia y trabajar abiertamente su propósito diabólico?

Probablemente ellos responderán que no son herejes, que simplemente desean presentar una fe cristiana que se adecue al “hombre moderno”. Pero continúa la interrogante: ¿De dónde derivan ellos la autoridad de reemplazar la doctrina de la Iglesia con esta fe cristiana “modernizada”? Tan pronto deseen cambiar la revelación cristiana adaptándola al hombre moderno, tan pronto creen que la mentalidad de una época es la medida de la revelación divina, dejan de ser católicos – ya sea que quieran admitir este hecho o no.

Los padres católicos no deberían de distraerse con el argumento evasivo que dice que lo único que está en juego es cuestión de pedagogía y que los católicos comunes, aquellos que no son especialistas en educación primaria y secundaria, son incompetentes para criticar este asunto técnico educativo.

Uno no tiene que ser pedagogo para saber que la enseñanza de un error no es la mejor manera de guiar a los estudiantes hacia la verdad. Además, y muy aparte del hecho que los autores de estos libros no están enseñando la doctrina de la Santa Iglesia Católica, es completamente errónea la noción que uno puede llevar a las personas hacia la verdad adaptándola a sus caprichos y antojos, como si la verdad fuese un producto en venta o un club que busca miembros. En la religión, dicha adaptación – aún para “propósitos pedagógicos” – puede llevar, si mucho, a una aceptación nominal de la fe cristiana, una fe que ha sido de tal manera adaptada, degradada tanto, reducida a la experiencia mundana periférica de una persona, que no requiere de una conversión para su recepción.

Además, un niño no sólo no tiene convicciones firmes que el maestro cristiano tendría que superar, sino que tiene una fuerte inclinación hacia la religión. Por lo tanto, a uno se le olvida que la manera de atraer el alma de un niño hacia Dios es presentarle la humanidad sagrada de Cristo en toda su gloria, confrontándolo con el mundo superior, el cual sobrepasa todo lo que este mundo puede ofrecer. Esto no sería menospreciar los valores naturales sino alentar al niño a que eleve su corazón a algo infinitamente más bello que los simples valores naturales, echarle un vistazo a la santidad de la humanidad de Cristo en Quien está perfeccionado y santificado lo natural.

Los autores seglares de los nuevos catecismos querrían que creyéramos que la religión les parecerá más animada, más vital a los niños si es asimilada en sus vidas diarias. Pero habrá muchas cosas para las cuales la atmósfera de la vida diaria es asfixiante en vez de vigorizante. Si asimilamos las nociones de lo bueno y lo malvado en las experiencias agradables y desagradables, exitosas y no exitosas de la vida familiar necesariamente falsificamos la naturaleza única de estas categorías morales. Dicho enfoque reductor nos obstruye el camino hacia cualquier compresión de la verdadera naturaleza del bien y del mal morales. Para que la realidad de la moralidad cristiana tome vida en la alma debe haber una concentración en la distinción entre el bien y el mal morales, la bondad moral y lo pecaminoso moral, y las nociones mundanas del éxito y el fracaso, el placer y no placer. Únicamente cuando la verdadera gloria del bien moral y la desgracia sin paralelo del pecado se presentan en una distinción radical con las otras antítesis puede el alma de un niño quedar vívida y permanentemente impresionada con el significado de la enseñanza moral cristiana.

Es una simple suposición creer que la religión será más vívida cuando es asimilada a la vida diaria. Como hemos visto, la asimilación significa distorsión. Si deseamos presentarle a un niño el mensaje de Cristo para permitir que se manifieste su misterio en toda su intensidad única, entonces debemos comenzar con las experiencias más altas del niño y ascender por analogía al nuevo y diferente mensaje de Cristo, siempre teniendo cuidado de hacerle justicia a su solemnidad única. Por ejemplo, deberíamos contarle al niño sobre las conversaciones de las grandes personalidades religiosas y hacer que conozca lo más que se pueda las vidas de los santos, quienes son las grandes pruebas de la realidad de la redención del mundo a través de Cristo.

Es común que los partidarios de los nuevos catecismos se justifiquen insistiendo que ellos representan únicamente los “experimentos” necesarios. La “experimentación” hará que la religión sea más “viva” para los estudiantes. Para estas personas, la dicho “experimentación” conjura asociaciones agradables de vitalidad, lo científico, flexibilidad sin prejuicios y anti-dogmática, la promesa de un futuro. Para ellos, cualquier perspectiva que no se presente como los resultados de la experimentación es considerada abstracta, irreal, impertinente. Sin embargo existen campos en los cuales la experimentación no es solo el método equivocado y, por lo tanto, no científico, sino que ciertamente es totalmente incompatible con la naturaleza del sujeto. Así mismo es con la ética, por ejemplo. La ética experimental no es científica, es auto-contradictoria y no ética. La mismísima idea de dejar que alguien cometa crímenes para poder estudiar la ética es absolutamente inmoral. Y hacer experimentos con las almas de los niños para poder descubrir la manera más eficaz de enseñar la religión es una falta de respeto irresponsable hacia los niños y la mismísima antítesis de una actitud religiosa. En tanto la experimentación quede confinada a asuntos meramente técnicos – por ejemplo, al problema de desarrollar la memoria – entonces ciertamente no habrá objeción alguna. Pero cuando la experimentación afecta el contenido de la fe, como lo hacen los catecismos que hemos estado discutiendo, cuando envenena las almas de los niños con una presentación distorsionada de la revelación cristiana, entonces se convierte en un juego diabólico, una terrible irreverencia hacia Dios y los niños inocentes; se convierte en una clase de vivisección espiritual, algo mucho peor que lo que sería la vivisección médica en los niños.

Pero repetimos: los padres católicos no deberían distraerse con argumentos pedagógicos. La pedagogía que se presenta para justificar los nuevos catecismos es falsa. Pero con lo que estamos confrontados no es una cuestión de pedagogía. Escrito en todos estos libros de texto, que en este preciso momento envenenan las almas de los pequeños niños, está el odio hacia lo sagrado y lo sobrenatural. Esto demanda de los padres católicos más que solo argumentos: demanda acción. Los derechos de los padres católicos en estos asuntos fue reafirmado por el Concilio Vaticano Segundo. Su deber en este momento está claro. Ellos no deben tolerar que a sus niños les alimenten a la fuerza una cristiandad seglarizada. Ellos deben insistir que estos libros de texto sean removidos de las escuelas católicas primarias, deben retener a sus hijos de estas escuelas así como también su respaldo financiero hasta que dichos libros inmorales, como lo son la serie de Word and Worship, sean removidos.

Las Profecías Asombrosas de Nuestra Señora de las Rosas en Bayside... http://www.tldm.org/spanish/messages/messages.htm
Estas profecías vinieron de Jesús, María, y los Santos a Verónica Lueken en Bayside, NY, de 1968 a 1995.

LOS GUARDIANES DE SUS ALMAS
"Hijos Míos, mantendréis una fundación firme de Fe en los corazones de vuestros hijos. No podéis esperar que otros hagan esta obligación paternal y maternal. Vosotros, como padres y madres sois los guardianes de las almas de vuestros hijos, y como tales, seréis los responsables delante de los ojos del Cielo por la caída de las almas de vuestros hijos. También vosotros, como padres de familia, pelearéis contra satanás conforme él busque destruir vuestras familias. Será padre contra hijo y madre contra hija, división en los hogares, conforme satanás se vuelve más fuerte en su conquista.” – Nuestra Señora, 1 de Abril, 1978

MAYORES MÁRTIRES
“Hijos Míos, no permitáis que los enemigos os den una visión de utopía sin sufrimiento. Hijos Míos, no permitáis que los enemigos os quiten el conocimiento de la existencia del Cielo, del infierno y del Purgatorio. Vuestros hijos son los mayores, ahora, los mayores mártires - y Yo digo mártires. Si no fuese por la relajación de los padres de familia, de las escuelas, y de muchos en la Iglesia de Mi Hijo, muchos de vosotros, padres de familia, no estaríais esta noche derramando lágrimas de remordimiento y pesar por la pérdida de vuestros hijos sin saber si ellos han sido salvados o perdidos para siempre. Yo os digo, de parte del corazón misericordioso de vuestra Madre: No lloréis, madre; El Padre Eterno es muy piadoso con vosotros. Él ha abierto Su Corazón a muchos de vuestros hijos, no juzgándolos por los falsos líderes." – Nuestra Señora, 25 de Noviembre, 1978

LEED LA BIBLIA A LOS NIÑOS
“Todos mantendréis una constante vigilia de oración a través de vuestro país y del mundo. Os prevengo a todos los padres de familia ahora para pasar por lo menos quince minutos de vuestro día leyendo la Biblia a vuestros hijos y vuestra familia. ¡Es ahora una orden del Padre Eterno! Porque los niños jóvenes ya no saben o reconocen a los ángeles guardianes. Los niños pequeños no tienen concepto de la verdad de la Divinidad o de la existencia de Mi Hijo. A los niños pequeños ahora les enseñan los caminos de satanás.” – Nuestra Señora, 21 de Noviembre, 1977

FUNDACIÓN FIRME DE FE
“Hijos Míos, mantendréis una fundación firme de Fe en los corazones de vuestros hijos. No podéis esperar que otros hagan esta obligación paternal y maternal. Vosotros, como padres y madres sois los guardianes de las almas de vuestros hijos, y como tales, seréis los responsables delante de los ojos del Cielo por la caída de las almas de vuestros hijos. También vosotros, como padres de familia, pelearéis contra satanás conforme él busque destruir vuestras familias.” – Nuestra Señora, 1 de Abril, 1978

PROGRAMADOS PARA MATAR
“¡Vuestros hijos están siendo programados para matar! ¡Vuestros hijos serán irreconocibles, si vosotros como padres de familia no actuáis para detener este mal!
“Satanás tiene una ventaja, hijos Míos. Él ha convencido a muchos que él es un mito. ¡Cuán astuto ha sido en su operación, hijos Míos!” – Nuestra Señora, 31 de Diciembre, 1977

INCITADOS EN SUS COLEGIOS POR SUS MAESTROS
"Los niños continuarán levantándose en contra de sus padres, incitados en sus colegios por sus maestros, los medios noticiosos, y todos los medios que han sido bien preparados para seducir a las almas de vuestros hijos." – Jesús, 25 de Julio, 1979

DEJADOS QUE VAGUEN
“Deberá haber una constante vigilia dentro de los hogares. Los padres de familia no deberán ser atrapados por la vida mundana, en su búsqueda por placer y entretenimiento, y dejar que sus hijos vaguen, sin disciplina, sin guía, y cayendo en pecado y la pérdida de sus almas." – Nuestra Señora, 7 de Septiembre, 1976

SUPERVISAR LA ENSEÑANZA
"Padres de familia tienen que tener una disciplina firme en el hogar. Los padres de familia tienen que supervisar la enseñanza de sus hijos." – Nuestra Señora, 5 de Agosto, 1977

VICTIMAS DE VUESTRA LAXITUD
“Hijos Míos, vuestros hijos, padres de familia, son las víctimas ahora de vuestra laxitud. Ellos son las víctimas de sus mayores. Toda clase de actos viles está siendo enseñada en sus escuelas en sus sociedades secretas. ¿Y por qué? Porque como padres de familia sois demasiado laxos en vuestro deber. Vosotros revoloteáis de aquí para allá buscando placeres y reuniendo los materiales de vuestro mundo. Y ¿para qué? ya que Yo pronto los convertiré en nada." – Nuestra Señora, 1 de Noviembre, 1977

DIRIGIDOS COMO ROBOTS
"Los padres tienen que cuidar a sus hijos, porque su pureza, y su espiritualidad les está siendo quitadas a una edad tierna, joven. La niñez, en la manera en que ahora los déspotas malignos y los líderes de los gobiernos de muchas naciones; los niños ya no son niños sino que serán dirigidos como robots y esclavos.
"Padres de familia, os he pedido que recéis, que mantengáis las imágenes, las estatuas en vuestras casas, que retengáis los sacramentales puestos sobre vuestros hijos." - Nuestra Señora, 14 de Agosto, 1979

MALES INSIDIOSOS
"Los padres de familia tienen que cuidar a sus hijos de estos males insidiosos que han entrado en las escuelas, los medios de entretenimiento, vuestros gobiernos. Cada avenida de vuestras vidas ahora está infiltrada por el mal." – Jesús, 18 de Mayo, 1977

MAYOR RESPONSABILIDAD
"Hijos Míos, todos tenéis que hacer ahora de vuestras casas una fortaleza contra la batalla del mal que se pelea furiosamente fuera de vuestra puerta. Debéis dar a vuestros hijos un fundamento básico y firme en el conocimiento de su Fe. No esperéis que lo reciban de otros. Vosotros, como padres de familia, ¡tenéis la mayor responsabilidad ahora de la enseñanza y educación de vuestros hijos de acuerdo a las leyes de Dios!" – Nuestra Señora, 28 de Mayo, 1977

FUENTES DE TENTACIÓN
"Todos mantendréis una constante vigilia de oración en vuestros hogares. Cuidad bien vuestras puertas contra el mal. Reunid las gracias para vuestros hijos y mantened su armadura sobre ellos en todo momento. Os encontraréis con mucha contradicción en el mundo, porque las personas del mundo aceptan únicamente lo del mundo, y personas del espíritu son conocidas únicamente por lo del espíritu, hijos Míos. Esto es un acertijo que comprenderéis con el tiempo. No seáis disparejamente emparejados. No os sujetéis, ni a vuestros hijos, a fuentes de tentación y maldad." – Nuestra Señora, 4 de Junio, 1977

LIBROS ESTÁN SIENDO CAMBIADOS
Verónica - Los libros están siendo cambiados para cubrir la maldad que ahora se comete. Los jóvenes están siendo indoctrinados para aceptar cambios que eliminarán la tradición, y aún la doctrina. Nuestra Señora dice que tenemos que rezar una constante vigilia de oración. Tiene gran poder sobre los demonios. – 19 de Noviembre, 1977

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Revised: March 29, 2012